La ciudad ocupa la vida de muchas personas; la razón construida a base de aceras, nos obliga a vivir apelotonados bajo la dictadura del verde y el rojo; un recinto de hormigón acristalado esconde nuestras emociones.... me detengo en oración, admirando cada una de las miles de ventanas.... Qué ocurre tras ellas ?.... alguien llora, ríe, se lamenta ; repite sus rutinas, confiando en su atractiva seguridad; hace un mes se ha muerto en soledad la vecina del segundo, sus hijos se han enterado hoy; a través del whatsapp se lo han comunicado al resto de familiares.

La piel se enciende entre personas en otras ventanas, las venas se dilatan y estallan en sudor de enamorados, amantes...infantes primerizos; llega un telegrama que confirma una marcha...una llegada; humeantes cocinas de abuelos con delantal preparando lentejas, o aquél caldo.....

Los edificios son descanso, y otras veces escondite, en estas últimas las ventanas no se abren, son solo un burocrático decorado.

A mi me salva el pasear, y admirar los recuerdos-monumentos...aquél estanque en el que el olor a vainilla del barquillero ha conseguido fijar la foto que nunca he tenido.....

La ciudad ocupa la vida de muchas personas, la mía también.