El concejal de Urbanismo y Movilidad, Juan Díaz Villoslada, ha recibido esta mañana a la Asociación de Afectados por las Infraestructuras en María Pita. En el encuentro se abordó el polémico enlace de la Vía Ártabra con la AP-9, en A Gándara, que afecta directamente a un humedal protegido y que fue elegido por la Xunta a pesar de lo aprobado en el Plan Viario de 2004. Villoslada instó a la Xunta a reflexionar sobre la conexión en A Gándara, puesto que, apunta, aún está a tiempo de hacerlo.

 Villoslada aseguró que es una prioridad en materia de movilidad que la Vía Ártabra llegue hasta la A-6, en Arteixo, "pero no sólo para el área metropolitana sino también para A Coruña. El objetivo de este vial, desde su concepción, es unir el área metropolitana con el fin de que los vehículos de Oleiros, por ejemplo, que quieren dirigirse a Arteixo no se vean obligados a entrar a la ciudad y lo hagan de forma directa. Se trata de disminuir en la ciudad el tráfico de vehículos pesados que transportan mercancías entre los polígonos industriales del área, de coches privados, etc."

En este sentido, Villoslada apuntó que el Gobierno local entiende que la conexión con la A-6 garantiza una conexión sin peaje. Además, cree que el entronque en A Gándara no debe crear una afección medioambiental y social al Concello de Cambre, puesto que la opción planteada por este ayuntamiento, realizar el enlace en Cuatro Caminos, permite continuar el trazado hacia la A-6, tal y como se gestó la propia infraestructura.

Por su parte, uno de los portavoces de la plataforma, Javier Rodríguez, apuntó que la Xunta debe retomar el Plan Viario que era accesible para todos y no sólo para los vecinos con mayor capacidad económica. "El tráfico pesado de los polígonos no debe cruzar por carreteras secundarias o el centro de A Coruña para ir de un ayuntamiento a otro".