Al menos desde finales del s. XV la Torre de Hércules se convirtió en la imagen de A Coruña, al tomarla el Ayuntamiento como tema para su escudo. A partir de entonces, ciudad y Torre fueron una misma realidad. Las primeras representaciones conocidas, en torno a 1448, son muy concisas, pero a lo largo del s. XVI se formuló la estructura del escudo, de manera que a partir de mediados del quinientos todos los elementos clave de la leyenda de Hércules estuvieron presentes.

Una de estas imágenes aparece en un documento oficial del emperador Carlos V, conocido como la Ejecutoria de 1552, junto a las Columnas de Hércules. En ella se representa el faro sobre un promontorio y dominando un amplio sector de la costa. Bajo los cimientos de la construcción está enterrada la cabeza coronada de Gerión que se dispone ladeada, como basamento de la propia Torre. En el remate aparece tanto la referencia al candil que colocó Espán, el legendario sobrino de Hércules que remató la construcción del faro, como al espejo que permitía descubrir a gran distancia las naves enemigas, también atribuido a Espán. Alrededor del faro aparecen las siete conchas de vieira que simbolizan las siete provincias del Reino de Galicia y, en algunos casos, sobre la Torre se representa el copón como una de las armas del Reino.

Una variante de esta imagen la encontramos en un escudo datado entre los s. XVI y XVII, conservado en el Museo Arqueológico del castillo de San Antón. Esta representación, con mínimas variantes, aparece también en los escudos del s. XVII que se encuentran en el ayuntamiento y en la muralla del Jardín de San Carlos. En ambos casos se representa a la Torre con su candil, pero la cabeza ladeada de Gerión ha sido sustituida, en esta última, por una calavera coronada que se dispone derecha, bajo la base de la Torre.