23 de octubre de 2017
Ferreiro explicó hoy que su voluntad será "trabajar esta propuesta de colaboración" en la reunión que mañana mantendrá en María Pita con José Llorca y Enrique Losada y en las que se programen a continuación
El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, hizo llegar esta mañana a los presidentes de Puertos del Estado, José Llorca, y de la Autoridad Portuaria de A Coruña, Enrique Losada, una propuesta de protocolo de colaboración que permita que tanto el Ayuntamiento como el resto de administraciones implicadas en el rescate de los terrenos portuarios de la ciudad y el impulso de un nuevo horizonte litoral puedan "emprender juntas una senda de trabajo en común". En una comparecencia ante la prensa, el regidor avanzó su intención de tratar esta propuesta de colaboración en la reunión que está prevista mañana con ambos interlocutores en el Palacio de María Pita. El documento también fue remitido tanto al resto de grupos que conforman la Corporación municipal de A Coruña como a los máximos dirigentes de la Xunta de Galicia y de la Diputación de A Coruña, al ser entidades llamadas a formar parte del consenso preciso para dar "una solución realista" para el puerto. "Confío en que este protocolo de colaboración que presentamos pueda ser debatido a partir de la reunión de este martes y que podamos ponernos a trabajar lo antes posible en la hoja de ruta que consigamos acordar", insistió Ferreiro, que, con respecto al resto de administraciones implicadas, destacó que "con unos presupuestos que están en trámite, es el momento de dar pasos".
"Hace algo más de una semana, de manera absolutamente desleal e improvisada, el presidente de la Xunta y el presidente de Puertos del Estado se hicieron una foto en A Coruña y anunciaron un proyecto borroso para paralizar, temporalmente, la venta de una parte de nuestra fachada marítima. Más allá de las incógnitas que ese anuncio dejó sin despejar, sigue siendo una operación que pasa por la subasta de una parte de los terrenos, tanto del Hotel Finisterre como del muelle de San Diego, y sigue siendo una propuesta nada realista que pasa por especular, con miles de viviendas, en el mayor de los muelles interiores de la ciudad", dijo el alcalde, respecto del anuncio público hecho por el mandatario autonómico en un acto al que no fue invitado ningún representante del gobierno local de A Coruña ni de la Autoridad Portuaria.
Principios generales de la propuesta
El alcalde detalló ante la prensa los principios generales de la propuesta, que se concretan "en un protocolo de colaboración que, evidentemente, está sujeto a cambios". "Los principales ítems que se deben abordar pasan por una solución integral, garantizar un liderazgo público, diálogo y cooperación entre las administraciones implicadas, lealtad institucional, realismo, cero especulación, creación de empleo y 'Más Coruña'", enumeró.
"Es preciso conseguir una solución integral que necesariamente pase por entender que la orilla atlántica de A Coruña no se puede despiezar. Requiere un proyecto integral de planificación y transformación, que incluya tanto los terrenos como en los que hoy se ubican el Hotel Finisterre y la Solana, como los muelles interiores afectados por los convenios de 2004, esto es, tanto Calvo Sotelo y Batería como San Diego", comentó el primer edil. "Por su parte, tanto la titularidad de los terrenos como la iniciativa en su transformación deben de ser de carácter público, tal y como vienen reclamando la mayoría de la Corporación de A Coruña, el vecindario y la Comisión Aberta en Defensa do Común", dijo. Precisamente, por ese motivo, una de las propuestas municipales implica la constitución de un consorcio presidido por el Ayuntamiento de A Coruña y participado por otras entidades públicas, como ADIF --en calidad de poseedor de una infraestructura en San Diego--, Puertos del Estado, Autoridad Portuaria, Ministerio de Fomento, Diputación provincial y Xunta de Galicia.
"El impulso de un nuevo horizonte litoral exige, además de la firma de un nuevo convenio y de unos estatutos de consenso para el consorcio, de la modificación del PGOM, la Delimitación de Espacios y Usos Portuarios, el Plan Especial del Puerto y otros documentos", hizo notar el alcalde, quien señaló que estos cambios "sólo se podrán trabajar y realizar desde el diálogo y la cooperación". Por este motivo, entre las propuestas del gobierno local también figura "la creación inmediata de un grupo de trabajo que el Ayuntamiento puede coordinar". "Precisamos reglas claras y transparentes, un marco de colaboración aceptado por todas las partes y con mecanismos de seguimiento", manifestó, al hilo, en referencia a la necesaria lealtad institucional.
Convenios urbanísticos de 2004
Tal y como explicó el alcalde, otro de los puntos clave de la propuesta de protocolo remitida a Puertos del Estado, Autoridad Portuaria, Xunta y Diputación pasa por el "realismo". "Los convenios urbanísticos de 2004 no son realistas desde la perspectiva actual. Pretender, en este momento, amortizar la enorme deuda de la Autoridad Portuaria vendiendo San Diego, además de intolerable para la ciudad, tampoco es realista. Nuestra propuesta es realista, en la medida en que no cierra los ojos delante del problema que, en este caso es la deuda de la Autoridad Portuaria, y es solidaria con el impulso del Puerto Exterior, que es importante también para toda el área Metropolitana", comentó. "Creemos que la única salida posible es que las administraciones apuesten tanto por aliviar la deuda del Puerto como por impulsar Langosteira y desarrollar, sin hipotecas, un gran proyecto para A Coruña", evidenció.
Según recordó en la comparecencia, los convenios firmados en el año 2004 suponen "una hipoteca para la ciudad", al estar basados en la financiación de una infraestructura como el Puerto Exterior, "que está llamada a ser esencial, pero que acumula sobrecostos y carencias importantes desarrollando un proyecto urbanístico muy poco realista y nada apropiado para A Coruña, privándola de 450.000 metros cuadrados en su fachada marítima". Del mismo modo, Ferreiro recordó como la Autoridad de A Coruña, con el voto favorable de todos los representantes de la Xunta y el Estado, y con la única excepción del concejal de Rexeneración Urbana del Ayuntamiento de A Coruña, reactivó aquellos convenios "y planificó y dio luz verde a la subasta de los terrenos portuarios", comenzando por la Solana y el Hotel Finisterre. Si la venta logró paralizarse fue, según incidió, por las reiteradas peticiones de la corporación, "acompañando el sentir mayoritario de la ciudadanía de A Coruña y el posicionamiento firme y claro del gobierno local" para la revisión de esos acuerdos de 2004 "para procurar un nuevo horizonte, más sostenible, ajustado a las necesidades actuales de la ciudad y consagrado a la creación de empleo y a la dotación de equipaciones públicas y espacios libres". Desde ahí, y en las dos únicas reuniones del Ayuntamiento con Puertos del Estado y la Autoridad Portuaria, el gobierno local trasladó su proyecto para impulsar "un ente público que pudiera llevar adelante la transformación global de la fachada marítima, garantizando la titularidad pública de los terrenos y la iniciativa pública de la gestión", una vía que en un primer momento contó, según hizo notar Ferreiro, con la "simpatía del resto de interlocutores" y en la que se preveía seguir avanzando en la reunión prevista para febrero y pospuesta por Puertos del Estado este mes de octubre.
La propuesta de protocolo de colaboración también recoge la necesidad de un compromiso contra la especulación en el borde litoral. "El nuevo horizonte, resultado de la revisión de los convenios de 2004, debe de tener una premisa clara, y es que los terrenos portuarios no pueden estar al servicio de la especulación ni el enriquecimiento de nadie, así como tampoco pueden quedar a merced del mercado", apuntó.
"Todas estas actuaciones también tienen que redundar en 'Más Coruña'", manifestó el mandatario local, que incidió en que "los terrenos portuarios deben de ser una oportunidad para mejorar la movilidad ciclista, peatonal, ferroviaria y viaria de la ciudad". "Podemos ganar espacios libres, dando continuidad a los Jardines de Méndez Núñez, creando equipaciones, tanto comunes como singulares, ampliando zonas verdes, conservando y poniendo en valor el patrimonio público y la memoria del mar, y dotando a la ciudad de una fachada de interés arquitectónico", dijo.
Por último, el protocolo, que postula una serie de criterios globales para todo el ámbito litoral, así como criterios específicos para cada uno de los muelles interiores, evidencia que "es necesario que el nuevo proyecto compatibilice el espacio público de calidad y las equipaciones con un impulso a las economías del mar mediante la creación de un distrito de innovación que contribuya a la creación de empleo y riqueza para los próximos 50 años, siendo San Diego el lugar adecuado".
Una apuesta por A Coruña
En el curso de su intervención, el alcalde de A Coruña hizo también una primera valoración del proyecto de Presupuestos de la Xunta de Galicia para el año 2018, una propuesta, aún en trámite, que calificó de "decepcionante y preocupante". "Ni la Xunta ni el Estado están cumpliendo las expectativas de la ciudadanía en A Coruña, y la insatisfacción por la falta de compromiso mostrada con la ciudad desde las últimas elecciones municipales es ampliamente mayoritaria", lamentó. "A Coruña sigue sin estar entre las prioridades de la Xunta, que muestra que en 2018, el gobierno autonómico volverá a estar ausente, pero nunca es tarde para rectificar. Cada uno de los grandes proyectos de esta ciudad, desde la estación Intermodal hasta la constitución del Área Metropolitana, es una oportunidad para cambiar de rumbo y apostar por A Coruña, y, evidentemente, la recuperación de los terrenos portuarios y el impulso de un nuevo horizonte litoral es una de esas oportunidades, si no la mayor. Es el momento de apostar por A Coruña", puso de relieve el regidor, recordando que el compromiso con una ciudad de la envergadura de A Coruña "tiene que manifestarse en los grandes proyectos, pero también en las pequeñas y medianas inversiones, porque los servicios públicos que cada Administración presta o ayuda a prestar en A Coruña dependen en buena medida del cuidado del día a día, del mantenimiento, de las mejoras pequeñas".
En este sentido, se remitió a necesidades como las que presentan los centros sanitarios de la ciudad, "más allá de que necesitemos un centro de salud en la zona centro, para lo cual el Ayuntamiento tiene, por cierto, previsto un espacio en el edificio del mercado de Santa Lucía y un segundo espacio alternativo, en el Paseo de los Puentes", o a las mejoras que precisan los centros educativos de la ciudad, "en los que la Xunta puede cumplir con su compromiso con la cubrición de los patios en los colegios existentes o invertir en las mejoras de sus instalaciones al ritmo similar al que el Ayuntamiento viene manteniendo durante estos dos últimos años, más allá de la urgente necesidad de un colegio en Nuevo Mesoiro, para cuya construcción el Ayuntamiento ya hizo los trámites hace tiempo, por lo que podía haberse empezado a construir con anterioridad".
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