El Gobierno municipal inicia en la semana que entra una nueva fase del proceso para la limpieza de la zona del Pasaje, que ya comenzó en la primera mitad de este año con la demolición de la antigua nave de La Toja y la recogida de unas 3.700 toneladas de residuos de material de obra y desecho de distinto tipo en una zona de 4.300 metros cuadrados en sucesivas intervenciones. Tal y como indica la concejala de Medio Ambiente, María García, los trabajos se retomarán a partir de mañana y comenzarán con la retirada de residuos en las zonas de maleza del sector que ya fue limpiado en los meses previos, y que quedan entre las viviendas, con el objeto de retirar restos de construcción y demolición, neumáticos, maderas, materiales plásticos o de aislamiento, vidrios, voluminosos o aparatos radio-eléctricos y piezas metálicas, entre otros. Del mismo modo, la nueva actuación contempla la demolición de 17 construcciones que ya están desocupadas, a través del proceso social y de acompañamiento que se está desarrollando con las familias dentro del Plan de Acceso a un Hábitat Digno que el Ayuntamiento tiene en marcha con las personas habitantes en este ámbito, para buscar soluciones habitacionales duraderas para las personas residentes en este asentamiento precario y trabajar también en el campo educativo, laboral y de la salud.

Como recuerda la titular de Medio Ambiente, la labor que el Ayuntamiento desarrolla en el asentamiento se está realizando de manera coordinada desde las distintas concejalías implicadas, el equipo especializado creado a este fin y también la Policía Local, "siempre teniendo en cuenta la perspectiva de la realidad social de los y de las habitantes y del trabajo hacia la plena integración que tiene que impulsar el Ayuntamiento". En este sentido, también ponen de relieve el trabajo de formación que se lleva a cabo con los y con las residentes en el ámbito de la gestión de los residuos, con campañas sobre separación de orgánico e inorgánico, y de uso del 'ecocubo' para las cocinas y, del mismo modo, para vincular la gestión de residuos con iniciativas de economía social, encaminadas también a la inclusión sociolaboral de colectivos desfavorecidos como el que conforman las personas residentes en el Pasaje, a través de la profesionalización de su actividad.

Esta nueva fase de trabajos, según apunta la responsable municipal, tienen un importe de 80.000 euros, 58.344 euros para la retirada de residuos y 21.780 para las labores de demolición, que requerirán como trabajo previo del desmontaje de las placas de fibrocemento con las que cuentan la mayor parte de ellas, y que requieren de la intervención de una empresa homologada por la Xunta.