El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, firmó este martes con el diputado Xosé Regueira Varela, responsable del Área de Cooperación con los Ayuntamientos de la Diputación, el convenio de colaboración entre las administraciones provincial y local para la financiación del proyecto que permitirá contar con un recorrido accesible para el tránsito peatonal entre las calles Maestro Clavé y Alfonso Molina. La actuación, que desarrolla la Concellería de Rexeneración Urbana e Dereito á Vivenda cuenta con un presupuesto de 149.933 euros, de los que la Diputación aporta un máximo del 80% y el Ayuntamiento el porcentaje restante, y servirá para mejorar la conectividad entre los barrios de la Falperra y Cuatro Caminos facilitando el itinerario a pie a través de la calle Juan Flórez, Federico Tapia y José Cornide.

Tal y como expone el responsable municipal de esta área, el concejal Xiao Varela, con esta intervención, el Gobierno local busca "dar sentido al proyecto desarrollado por el anterior ejecutivo al final del pasado mandato en la calle Maestro Clavé, una obra muy costosa y de dudosa justificación que no soluciona la accesibilidad para el entorno". Con ese objetivo, se contempla la implantación de un paso peatonal y la construcción de una escalera y una cuesta que comuniquen las calles Juan Flórez, Federico Tapia, que se encuentran a distinto nivel, para dar continuidad al itinerario peatonal de las escaleras de Maestro Clavé, y hasta José Cornide. Para eso se ejecutará además un muro en paralelo al que ya existe sobre la acera de Federico Tapia, que permitirá colocar en la parte superior una plataforma, desde la que partirán, de un lado, unas escaleras en dos tramos y, del otro, una cuesta, también en dos tramos. El proyecto incluye también la ampliación de la acera de la calle José Cornide -que conecta Federico Tapia con Alfonso Molina- y el cambio de ubicación de un paso peatonal de Federico Tapia, además de la creación de un segundo paso, para dar continuidad al recorrido desde la nueva cuesta y la nueva escalera. La reforma supone además el estrechamiento de la calzada en Federico Tapia para ganar espacio de acera y mejorar la accesibilidad peatonal, de manera que dé cabida a un único carril con espacio para el paso de los autobuses, y pequeñas mejoras en el entorno, como es el caso de la acera del último trecho de la calle Juan Flórez y los pasos peatonales existentes en la misma zona.