La Concejalía de Medio Ambiente ha hecho balance de su programa de educación ambiental en la primera mitad del año, un período en el que se incrementaron, tanto el número de personas participantes en los distintos programas como la oferta de visitas, cursos y exposiciones y actividades de los mismos, con el objetivo de "llegar a una mayor variedad de público de todas las edades y aumentar el grado de consciencia y responsabilidad de toda la ciudadanía en la protección del medio ambiente", según destaca la concejala de este área, María García, que hace notar que la programación continúa durante los meses de verano. En concreto, los programas dirigidos a escolares tuvieron en este último curso un total de 5.928 chicos y chicas, lo que supone un aumento de participación del 19,4% respecto al curso 2013/2014, y del 9,8% respecto al curso pasado. Hubo, dentro de este ámbito, un total de 441 actividades, tres por cada grupo escolar -una charla, un taller y una visita- y también se ampliaron los programas, de cinco a siete, con la incorporación de los relativos al anillamiento científico de aves y el de fauna urbana, que se suman a los de residuos urbanos, la ruta del agua en A Coruña, el relativo al aire, el programa 'Veo, veo', sobre biodiversidad de la ciudad y el relativo a energía y cambio climático.

En cuanto al programa de visitas, se pasó de las tres actividades que se realizaron en los primeros seis meses de 2015 a 52 entre enero y junio de este año, con una oferta que incluye como destinos la planta de residuos de Nostián, Cabo Vilán, las Fragas do Eume, el Monte de San Pedro, Punta Herminia, Santa Margarita, la torre de Hércules y su entorno y la Ría do Burgo. Del mismo modo, se amplió también el contenido del programa de cursos, jornadas y talleres de 1 a 16 respecto a la primera mitad del año pasado, con la incorporación de más talleres en centros cívicos y bibliotecas municipales, charlas o el Cinefórum, y también aumentaron de una a cuatro las exposiciones en itinerancia, lo que, como destaca la responsable municipal, permitió en conjunto llegar a más públicos. "Entendemos la educación ambiental como una herramienta de cambio y transformación social hacia una sociedad más sostenible, y por eso debe ir destinada a todos los sectores sociales, especialmente aquellos con mayor decisión sobre actividades que pueden tener impacto en el medio ambiente", destaca la responsable municipal. En este campo, García destaca la realización de una programación especial en junio por el Mes del Medio Ambiente, donde se concentraron muchas de las actividades del semestre, y que fueron diseñadas para tratar "muchos de los temas ambientales relevantes para la sociedad, tanto desde un punto de vista global como también local, sobre aspectos cercanos, con un enfoque que pretende también dar a conocer y poner en valor los valores naturales que nos rodean", expone la concejala.

Actividades estivales

Además, desde el pasado 1 de julio y hasta el 9 de septiembre está activo, dentro del ámbito de la educación ambiental, el programa de playas, en el que se desarrollan actividades dirigidas a un público familiar y centradas en el medio marino. Estas tienen lugar de lugar de lunes a viernes en la playa de Riazor, en un stand instalado al lado del puesto de Salvamento, donde también se informa de los horarios de los talleres. Asimismo, las fiestas de los barrios incorporarán este año una vertiente ambiental, con la programación de talleres educativos dirigidos también a público familiar donde se darán a conocer cuestiones como las aves urbanas, la problemática de los residuos -a través de la reutilización de materiales frecuentes en los hogares- o la fabricación de cocinas solares.