El concejal de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, confía en que la firma del convenio que permitirá la licitación de las obras de construcción de la Intermodal se desbloquee en las próximas semanas. Tras recibir la nueva propuesta de Adif con los requerimientos anunciados por el ente, la Concejalía espera darles una respuesta a Adif y a la Xunta la próxima semana. El concejal de Urbanismo explicó que, aunque existen nuevos planteamientos urbanísticos que no conocían y que requieren de un análisis minucioso, la nueva propuesta no choca con los intereses municipales.

Las demandas de Adif, explicó se centran en un aumento de su edificabilidad en el ámbito de la estación para poder disponer de más espacio para servicios ferroviarios. La revisión de estas peticiones, señaló, supondrá retrasar los cambios en el plan general que el Ayuntamiento ya aprobó para garantizar los accesos a Intermodal.

En cuanto a la demanda de la titularidad de terrenos en el ámbito próximo a la estación, Villoslada aclaró que este convenio, además de establecer las responsabilidades de Junta, Adif y Ayuntamiento en la Intermodal, servirá para regularizar toda una serie de actuaciones que Adif realizó en el ámbito de Vío con una mejora de su edificabilidad para servicios vinculados al uso ferroviario. "Es algo complejo que el Ayuntamiento tendrá que estudiar", dijo Villoslada, que lamentó que el ente ferroviario no presentase estos requerimientos antes y poder "así tener el proyecto más avanzado".

Respeto a las expropiaciones que se tendrán que realizar con motivo de la ampliación del nuevo CHUAC, la concejalía aún desconoce el proyecto urbanístico y técnico "Está prevista una reunión los próximos días con responsables de la Xunta para analizar cuál es el ámbito concreto, que modificaciones de viario hay que realizar y que ámbito expropiatorio tiene previsto establecer", señaló el concejal.

Villoslada hizo estas declaraciones durante la visita que realizó esta mañana con la directora de Movilidad, Elvira Quintairos, y personal técnico de la concejalía a la ronda de Nelle para supervisar la marcha de los trabajos previos a la demolición del viaducto que tendrá lugar a mediados de febrero. Se trata, explicó, de una visita con el fin de conocer cuestiones técnicas relativas a la demolición para evitar, en la medida de lo posible, molestias al vecindario y aficiones al tráfico. "Buscamos que el proceso deconstrutivo sea lo más rápido posible", dijo. El edil mantuvo distintos encuentros con las personas residentes y con las/con los comerciantes para analizar el proceso de reurbanización de la zona. La clave del proyecto, dijo, está en lograr la reurbanización de una zona muy degradada desde el punto de vista ambiental y urbanístico. "Nuestro objetivo es recuperar espacios públicos para los vecinos y las vecinas y garantizarles mayor calidad de vida; devolverles la ciudad a los peatones siendo conscientes de que existe un tráfico que debemos regular y que tenemos que presentar alternativas", subrayó. La obra tiene un plazo de ejecución de un año y, aunque prefiere ser cauto a la hora de fijar fechas, el Ayuntamiento no descarta que puedan reducirse los tiempos.

El edil visitó también los trabajos de reurbanización que se están llevando a cabo en la calle Puga y Parga, en el barrio de Cuatro Caminos, que contará con una plataforma única y con un carril bici que supone un paso más en la conexión entre el carril bici metropolitano y lo de Salado Torres. Este tramo se unirá, en su parte inicial, con el paso para bicicletas que ya existe bajo el viaducto de San Pedro de Mezonzo, que servirá en un futuro como punto de inicio para darle continuidad al carril bici por la avenida de Fernández Latorre.