La Junta de Gobierno Local dará el visto bueno este viernes a la adjudicación del contrato que permitirá implantar en la ciudad una nueva señalización de tráfico tanto horizontal como vertical, así como elementos de balizamiento. Este servicio también contempla la conservación, mantenimiento y reposición de las señales ya existentes. El contrato, con un precio máximo de licitación de 349.973 euros, tiene una vigencia de cuatro años, prorrogables a otros dos. El concejal de Movilidad Sostenible, Daniel Díaz Grandío, destacó que "es la primera vez que el Ayuntamiento de A Coruña va a contar con un servicio que abarcará, de forma conjunta, todos los elementos de señalización".

"Lo que conseguimos de esta forma es agilizar mucho el proceso de colocación de nuevos elementos de señalización y de balizamiento, algo fundamental en este momento, en el que estamos repensando de forma global las líneas de transporte público tanto urbanas como metropolitanas y cuando estamos dando pasos muy importantes para, dentro de poco, poder ver la materialización de nuestros avances en la implantación de nuevas formas de movilidad", explicó. "Esta integración de contratos servirá para abordar de manera mucho más sencilla todas las actuaciones de ampliación del carril bici que no requieran de obra de infraestructura", añadió.

La señalización horizontal comprende las marcas viarias sobre el pavimento u otros elementos de la calzada. El contrato incluye el deber de llevar a cabo, si así se estima pertinente, la nueva implantación o adaptación de las actuales marcas viarias, de forma que se contribuya a mejorar las condiciones de circulación y seguridad viaria, así como eliminar o modificar las marcas desgastadas o inadecuadas.

Como señalización vertical y balizamiento se entienden tanto las señales metálicas verticales -ya sean fijas o móviles-, de advertencia, peligro, reglamentación o información, así como elementos de balización, delimitación, defensa o guía (captaforos, reductores de velocidad, bolardos, biondas o delineadores) que sirvan para advertir de posibles incidencias en el tráfico. Bajo esta denominación también se incluyen elementos de señalización interiormente iluminados con tecnología LED, así como sistemas de alimentación energética, si bien quedan excluidos elementos verticales como semáforos, paneles informativos variables y otro tipo de señalización luminosa.