El Ayuntamiento de A Coruña recibió de la empresa proveedora las primeras Tarjetas Millennium, que comenzarán a expedirse a partir de mañana, viernes 27, una vez testeadas por parte de la Concejalía de Mobilidade Sostible para garantizar su correcto funcionamiento y respetando la orden de entrada de las solicitudes recogidas en la lista de espera para el cambio. Los usuarios y usuarias que las precisen deberán acudir a las oficinas municipales situadas en el Pazo de María Pita, así como a la Estación de Autobuses o al Fórum Metropolitano para solicitarlas.

El concejal de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz Grandío, lamentó “la espera que tuvieron que soportar muchos vecinos y vecinas” que tenían solicitada una nueva tarjeta Millennium, aunque recordó que “los problemas vinieron derivados de la gestión que de estos dispositivos se hizo en anteriores etapas de Gobierno”. Desde su implantación, la Millennium estuvo vinculada a una única empresa, al estar dotada de un circuito de fabricación y un software específicos, así como una aplicación diseñada de manera individualizada para el cartón que alberga el chip. Los problemas de suministro de la empresa proveedora motivaron que el Ayuntamiento tuviera que suspender el servicio de expedición de tarjetas.

Por otro lado, el edil manifestó que, en este momento, el Ayuntamiento “cuenta ya con un stock de tarjetas Millennium suficiente para cubrir las necesidades de todo el próximo año”. Mientras tanto, el Gobierno local está analizando numerosos informes con el fin de conseguir “un sistema más fiable y económico, que reduzca drásticamente el coste que tiene para el Ayuntamiento cada tarjeta y que, sobre todo, acabe con las molestias de los y las usuarias del transporte urbano”. “Lo que estamos intentando desde el Gobierno local es que en un futuro, las Millennium se puedan solicitar a diversos proveedores, y no solo a uno, como ahora”, comentó el responsable municipal.

“Cuanto menos fallen estas tarjetas, más rápido podrán subir las personas al transporte urbano, y antes mejoraremos el tránsito del transporte público. Además, si las tarjetas no se averían, reducimos el coste que suponen para el Ayuntamiento y para los vecinos y vecinas que tienen que volver a solicitarla”, indicó.