Minecraft es un juego de aventuras, exploración y creatividad en el que, desde una perspectiva en primera persona, tendremos que sobrevivir en un mundo compuesto por bloques -similares a los de Lego- que podremos manejar a nuestro antojo.

El único límite que tenemos es la imaginación y, a poco que comencemos a crear, nos daremos cuenta de que las posibilidades a nuestra disposición son prácticamente infinitas.

Pero Minecraft no sólo sirve para jugar. Gracias a la creación de complementos, el juego se puede convertir en una herramienta de aprendizaje de gran valor. Podrás jugar al Minecraft al mismo tiempo que aprendes electricidad, domótica, programación o conceptos sobre redes informáticas .

Con Minecraft desarrollamos además competencias como: la creatividad; diferentes maneras de resolver un problema; competencias sociales; empatía, si se juega en equipo; pensamiento estratégico (sabiendo lo que se quiere, se busca la forma de conseguirlo); visión espacial; y desde luego se desarrolla el «Fun Failure»,  se pierde el miedo a fallar, porque forma parte del propio juego.

¿Te animas a sobrevivir en el mundo Minecraft?