La concejala de Tráfico, Movilidad y Uso y Utilización del Dominio Público, Begoña Freire, se ha reunido esta mañana con las asociaciones de vecinos y comerciantes de la Ciudad Vieja para detallarles la primera fase de la peatonalización del casco histórico, una vieja demanda de los residentes en la zona y que, según les ha comunicado la responsable municipal, se implantará a mediados de agosto.

Begoña Freire destacó que este proyecto nace con el claro objetivo de mejorar la calidad de vida de los residentes del casco histórico y de las personas que visiten una de las zonas más emblemáticas de la ciudad. Esta propuesta se presenta de acuerdo a las directrices del primer Plan Municipal de Movilidad Sostenible (PMUS) de A Coruña y del futuro Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI), y teniendo en cuenta a los vecinos y comerciantes del barrio, puesto que la intención del actual equipo de gobierno -al igual que está ocurriendo en los proyectos de urbanización de la Marina y O Parrote- es convertir al peatón en el protagonista principal.

"Les he traslado a los representantes de los vecinos y comerciantes que la peatonalización no solo es un objetivo del Gobierno municipal, sino que también es de los vecinos y comerciantes del barrio", señaló la concejala de Movilidad, quien se ha reunido esta mañana por tercera vez con las asociaciones de vecinos y comerciantes del casco histórico para profundizar en el plan de peatonalización tan demandado durante años por los propios residentes, quienes vieron cómo se incumplieron de manera sistemática los plazos que se marcaron anteriores responsables municipales para su ejecución. En la reunión de hoy también estuvieron presentes las concejalas de Barrio Susana Pazo y Carmen Hervada y el director del área de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Carlos García Touriñán.

Begoña Freire señaló que, tras un análisis exhaustivo por parte de los técnicos de su departamento y recogiendo la filosofía del PMUS, el Ayuntamiento ha decidido acometer la peatonalización de la Ciudad Vieja en dos fases.

PRIMERA FASE

La concejala de Tráfico y Movilidad explicó que esta primera fase se implantará a mediados de agosto, después de abrir un plazo de solicitudes que en cualquier caso se simplificará, dado que el Ayuntamiento dispone de datos de vehículos censados, residentes empadronados y de actividades con domicilio en la Ciudad Vieja. Esta primera fase tendrá las siguientes características:

- La peatonalización se circunscribirá a la zona intramuros del casco histórico, es decir, el área comprendida entre Puerta Real, el paseo de O Parrote hasta los jardines de San Carlos, la calle Maestranza, Campo de la Estrada, Capitán Troncoso y plaza de los Ángeles.

- Estará permitida la circulación en la zona intramuros para todos los vehículos, pero solo los residentes y los titulares de establecimientos de la Ciudad Vieja podrán estacionar dentro del casco histórico. En el caso de los comerciantes, podrán aparcar para las labores de carga y descarga durante un tiempo limitado de un máximo de 30 minutos. Además de garantizar la carga y descarga, también se permitirán la parada de los servicios de emergencias y para permisos especiales o temporales.

- En todo momento se garantizará el acceso a los portales y de los vehículos de emergencias, además de respetarse las construcciones de interés histórico y cultural existentes en el barrio. No se podrá estacionar en vías en las que el espacio libre que quede para la circulación -una vez aparque el vehículo- sea inferior a los 3 metros de ancho.

- La velocidad máxima será de 10 kilómetros por hora en aquellas calles en las que solo se debe circular para acceder a garajes; mientras que la velocidad será de 20 km/h en el resto de vías de la zona intramuros y de 30 km/h en la circunvalación perimetral.

- Para velar por el cumplimiento de esta primera fase de la peatonalización, se instalarán señales verticales de información y restricción en las puertas o accesos habilitados a la Ciudad Vieja -informarán de que está prohibido estacionar con excepción de vehículos autorizados- y se contará con la presencia de la Policía Local para comprobar las tarjetas de autorización de los vehículos, así como la legalidad del aparcamiento.

SEGUNDA FASE

El Ayuntamiento concluirá la recuperación del espacio peatonal de la Ciudad Vieja en una segunda fase cuyo funcionamiento se coordinará con el final de las obras de urbanización de la Marina:

- La circulación en la zona intramuros del casco histórico se limitará exclusivamente a residentes y titulares de establecimientos. Los residentes empadronados (propietarios y en arrendamiento) podrán acceder a la zona sin limitación de hora o de día, al igual que los servicios de emergencias, de taxi y otros servicios autorizados.

- La circulación estará permitida a todos los vehículos en el perímetro de la Ciudad Vieja, creándose un anillo de circunvalación que posibilitará el acercamiento de cualquiera persona al casco histórico, impulsando así la revitalización y recuperación patrimonial y comercial de la zona.

- El Gobierno municipal habilitará plazas de aparcamiento para los residentes del casco histórico en el perímetro (fuera de la zona intramuros). Por ejemplo, en la calle Maestranza se modificará la circulación para que sea de un único sentido, facilitando así la creación de más plazas de estacionamiento para los residentes. Se calcula que se habilitarán un total de 300 plazas para residentes en el perímetro de la Ciudad Vieja.

- Las zonas de carga y descarga tendrán el mismo horario que existe en otras áreas peatonales de la ciudad. Será entre las 07.00 y las 11.00 horas.

- Al igual que en la primera fase de la peatonalización, en todo momento se garantizará el acceso a los portales y de los vehículos de emergencias, además de respetarse las construcciones de interés histórico y cultural del barrio.

- Para velar por el cumplimiento de esta segunda y definitiva fase de la peatonalización, se instalarán sistemas de control de acceso (lectores de matrícula) de forma sincronizada con las restricciones a disponer en la Marina.

La concejala de Movilidad también explicó que se ha decidido que la recuperación de la Ciudad Vieja para los peatones se desarrolle en dos etapas porque la primera fase es necesaria para sincronizar el proceso con las obras de la Marina, que han generado un incremento de la capacidad de los viales de los paseos de la Dársena y de O Parrote, suprimiendo su aparcamiento, así como una mejora de la fluidez de la propia avenida de Montoto. Además, el plan de tráfico está en constante seguimiento técnico, se ha desviado el tráfico por otras vías y, mientras no se calme el tráfico en los paseos de la Dársena y O Parrote, no es viable acometer los cambios de dirección necesarios para la segunda fase de la peatonalización. El objetivo es que los sentidos de circulación y los accesos al casco histórico sean compatibles con la movilidad en la Marina y O Parrote una vez se finalice la urbanización. "Lo que sí es ahora viable es reducir el aparcamiento en el recinto intramuros e iniciar el proceso de sincronización para componer la imagen final", señaló Freire.

TARJETAS DE RESIDENTES Y COMERCIANTES

La reunión de esta mañana del Ayuntamiento con los representantes vecinales y del comercio del casco histórico ha permitido avanzar en la planificación de la peatonalización, de la que ya se informó a ambos colectivos en dos encuentros anteriores -el primero en el Palacio Municipal de María Pita y el segundo durante un recorrido por las propias calles del barrio para analizar in situ la peatonalización-.

Begoña Freire explicó a vecinos y comerciantes el procedimiento que deberán seguir para obtener una tarjeta que les autorice para -además de circular por las calles de la Ciudad Vieja en esta primera fase de la peatonalización al igual que el resto de vehículos- poder también aparcar dentro de la zona intramuros.

El Ayuntamiento enviará una carta tanto a los residentes empadronados en la Ciudad Vieja -con vehículo a su nombre y censado en el barrio, y que se encuentren al corriente en el pago de los impuestos municipales- como a los titulares de establecimientos con atención al público en la Ciudad Vieja y que también deberán al estar al corriente del pago de sus impuestos. En la carta se les indicará un teléfono de información y un punto de atención al público para la gestión de la tarjeta. Además, se informará de la documentación y requisitos necesarios según el tipo de permiso a través de la página web del Ayuntamiento y de las hojas informativas que tendrán a su disposición en el punto de atención al público.

Begoña Freire explicó que también se expedirá una tarjeta para necesidades especiales, como son las personas con movilidad reducida. En este caso, la tarjeta incorporará la fecha de inicio y de fin de dicha autorización para estacionar.