La empresa Albada le comunicó este mediodía al Ayuntamiento que empezará a retirar, a partir de mañana, las cerca de 12.000 toneladas de rechazos acumulados desde el mes de abril, tal y como se le solicitó administrativamente, con la salida de camiones de la planta de Nostián. A partir del lunes, los técnicos municipales realizarán las revisiones oportunas, tal y como se estipula en el requerimiento que se les envió el pasado martes para comprobar que cumplen con los requisitos exigidos.

Medio Ambiente, que lleva desde lo inicio del mandato haciendo un seguimiento prácticamente diario de la situación, se vio en el deber de actuar esta semana ante los riesgos de seguridad que implica la acumulación de rechazos para las trabajadoras y trabajadores y el peligro ambiental derivado de una provisión que ya invade las vías de accesos a los antiguos vasos de la planta y que imposibilita casi el tránsito a pie y en vehículos. En este aspecto, para mandar el tercero de los requerimientos, aparejado a una advertencia de ejecución subsidiaria, el Ayuntamiento tuvo en cuenta el último informe técnico, en el que se estima que hay entre 10.000 y 12.000 toneladas de residuos almacenadas en A Coruña desde abril, cuando la Dirección General de Calidad Medioambiental prohibió el depósito de rechazos del Ayuntamiento de A Coruña en la escombrera de Grixoa (Santiago de Compostela).

Por otra parte, la concejalía estuvo estos meses en contacto permanente con la empresa a través de comunicados y personalmente, "con conversaciones fluidas y cordiales" en la busca de un apoyo mutuo. También mantuvo encuentros con las distintas administraciones con la reunión en julio entre la alcaldesa Inés Rey y el presidente Alberto Núñez Feijóo.

TRASLADO DIARIO

En el escrito que se les remitió el martes, el equipo municipal le exige también que se les dé salida a los rechazos que se están acumulando a diario, procedentes del ayuntamiento, para que no se produzcan nuevos aprovisionamientos en las instalaciones. En concreto, le reclama a la UTE que retire diariamente de la provisión de proceso y afinamento acopiado un mínimo de entre 135 y 150 toneladas de acuerdo con las estimaciones hechas por los técnicos municipales de residuos, que prevén que con una franja de entre 24 y 26 camiones diarios (de lunes a viernes) se puede eliminar todo el rechazo amontonado, gestionando a la vez lo que se genera por la operativa normal de la planta, en un plazo máximo de cuatro meses.

De este modo, Medio Ambiente le solicita a la empresa un informe diario relativo al control del movimientos de salida de la planta, en el que tendrán que distinguir entre Consorcio y Ayuntamiento, especificando, para este último, las toneladas correspondientes a la gestión diaria y las del stock acumulado.